¿Qué supone para usted pregonar a la Virgen de Gracia?
Sin duda alguna es un hermoso privilegio. Es la más bella tarea que le pueden encomendar a un benamejicense. Son muchos los sentimientos que se mueven dentro de todos aquellos que estamos enamorados de nuestra Madre; y el Pregón se hace una cita ineludible para que todo un pueblo recuerde las numerosas vivencias tenidas y se ilusione por vivir los anhelados momentos que no se harán esperar.
¿Qué recuerdo te queda del momento en que te lo propusieron?
Para mí aquella tarde permanecerá indeleble en mi memoria. En un primer momento parecía que no había escuchado bien lo que me proponían. Una sensación indescriptible embargó mi corazón. Vacilé por un instante en dar la respuesta, pero fue inevitable ¿quién podría negarse a ello? Durante un rato caminé nerviosa y, casi sin darme cuenta, mis pasos me llevaron hacia Ella. Con lágrimas en los ojos le di una y mil veces las gracias por elegirme y después le pedí que desde aquel momento guiase mis manos para poder plasmar en un papel todo lo que por Ella siento.
¿Qué te ha parecido la presentación de la pregonera que se ha hecho este año por tercera vez en la historia de la Cofradía?
Ha sido un acto muy emotivo en ese marco incomparable de Jesús del Alto, en el cual recibí el cariño de la gente que asistió. Sin duda alguna, fue una bella antesala de lo que será el día 10 de Septiembre.
¿Qué relación tienes con tu presentadora?
Mª Teresa Royón Plasencia será la encargada de presentarme, los motivos que me han llevado a elegirla son muy sencillos. Mª Teresa es mi amiga pero una amiga con mayúsculas. Es la persona con la que comparto alegrías, a la que revelo confidencias, el hombro en el que llorar las inevitables tristezas… Pero sobre todo es la persona con la que comparto el amor que siento hacia la Virgen de Gracia. Septiembre para nosotras es un mes especial en el que, siempre juntas, vivimos emotivas experiencias. Desde que le propuse ser mi presentadora, son muchos los momentos en los que imaginamos ese ya cercano 10 de Septiembre para nosotras una cita muy esperada.
¿Tienes el pregón totalmente cerrado?
Aún no. Cada vez que lo leo surgen nuevas ideas, acuden a la mente momentos vividos que merecen ser contados.
De aquí al pregón, ¿te pueden surgir nuevas ideas para incluir en el texto?
Aunque prácticamente ya está estructurado siempre van surgiendo ideas pero quiero ir cerrándolo ya.
¿Lo has ensayado con alguien?
Sí, Mª Teresa y yo para ir corrigiendo los diferentes fallos que van surgiendo.
¿Qué nos puedes adelantar del pregón?
Con el pregón pretendo resaltar ese ramillete de gracias que adorna a nuestra Madre. Recordar vivencias, emocionarnos con los recuerdos,…Convertirme en la voz encargada de susurrarle a la Virgen de Gracia que el corazón de Benamejí late al oír su nombre.
¿Qué recuerdo tiene de la coronación de la Virgen en el 2.007?
Desde que conocí la noticia imaginaba como podía ser ese momento. Pero la realidad quedaba muy por encima de lo soñado. Benamejí se convirtió en un inmenso altar: peregrinaciones, actos de formación, procesiones… Y el ansiado día donde todo un pueblo, más unido que nunca entonó emocionado el himno de nuestra Madre mientras una corona de amor ceñía sus sienes. Los que tuvimos la suerte de vivir ese momento, no lo olvidaremos.
¿Qué representa la imagen de la Virgen para ti?
Para mí, es la madre de manos protectoras, la que siempre me espera al final del camino para consolar mis penas. La que en silencio me acompaña y guía mis pasos por el escarpado sendero de la vida. Es la madre paciente, de dulce mirada, de sincera sonrisa. Es la elegida de Dios.
¿Qué le pedirías a los benamejicenses de cara a las fiestas patronales?
En esos días de encuentro con nuestra Madre, les pido que vivan con verdadera fe, cada uno de los actos programados. No dejemos escapar esos momentos y dediquémoslos a hablar con nuestra Virgen, a acompañarle. Demostrémosle que Benamejí está orgulloso de tener por Madre a la merecedora de todas las gracias.
No quiero finalizar esta entrevista, sin decir que os espero el próximo 10 de Septiembre para que juntos podamos gritar como una única garganta: “Viva la Virgen de Gracia”